PUMA CONCOLOR
El puma, león de montaña o león
americano (Nombre científico: Puma concolor)
es un mamífero carnívoro de la familia Felidae nativo
de América. Este felino vive en más lugares que cualquier otro mamífero silvestre terrestre del
continente.
El puma es adaptable y generalista,
por lo que vive en los principales biomas de toda América.
Como cazador y depredador de emboscada,
el puma obtiene una amplia variedad de presas. Su principal alimento son
los ungulados como el ciervo, en particular en la parte septentrional de
su área de distribución, pero también caza camélidos como el guanaco y
especies tan pequeñas como insectos y roedores. Prefiere hábitat con
vegetación densa durante las horas de acecho, pero puede vivir en zonas
abiertas.
El puma es territorial y tiene una baja densidad
de población. La extensión de su territorio depende de la vegetación y de la
abundancia de presas.
Características:
Los pumas son felinos esbeltos y ágiles. La talla adulta de pie es de
alrededor de 70 a 90 cm de
altura en los hombros. La longitud de los machos adultos es de alrededor de 2,7
m de largo de la nariz a punta de la cola, aunque en general oscila entre
2,0 y 2,5. Los machos
tienen un peso promedio de entre 60 a 85 kg. El peso promedio de las hembras está entre 40 y 62 kg.
La cabeza del puma es
redonda y las orejas están erguidas. Posee poderosas patas delanteras, cuello, mandíbula y colmillos que le sirven para atrapar y matar grandes presas. Tienen cinco garras retráctiles en las patas delanteras, útiles para aferrarse a la presa.
A pesar de su tamaño, no
es normalmente clasificado entre los grandes felinos porque no pueden rugir, ya que carecen de la laringe especializada para hacerlo.
La
coloración del puma es uniforme (de ahí el nombre latino concolor), pero puede variar mucho entre los individuos e
incluso entre hermanos. El pelaje es generalmente dorado, pero puede ser de
color gris plateado o rojizo, con ligeros parches en el cuerpo, incluidas cerca
de las mandíbulas, la barbilla y el cuello. Las crías nacen con ojos azules y
anillos en la cola; los cachorros son más pálidos, y las manchas siguen en sus
flancos.
Caza y dieta:
El
puma come cualquier animal que pueda capturar, desde insectos a los grandes ungulados. Al igual que los demás felinos, se trata de un carnívoro obligado. Sus presas más importantes son las
diversas especies de venado, en particular en América del Norte: el ciervo mula, el venado de cola blanca, e incluso los grandes alces son cazados por el puma.
El puma es típicamente
un depredador de emboscada. Se esconde entre los árboles y en repisas, donde
aguarda antes de dar un poderoso salto hacia la parte trasera de su presa y
asfixiarla con una mordedura en el cuello. Tiene una columna vertebral flexible
que lo ayuda en su técnica de cazar.
Se estima, en general, que mata un gran
ungulado cada dos semanas. El plazo para las hembras se reduce por la
alimentación de los jóvenes, y puede alcanzar la cifra de una muerte cada tres
días en la época en que los cachorros son casi maduros, en torno a 15 meses. El
puma arrastra su víctima a un lugar preferido, lo cubre con pasto, y retorna
para alimentarse de nuevo al cabo de algunos días. En general se considera que
el puma es un recolector de sus desperdicios y rara vez no se comen la presa
que han matado.
Reproducción y ciclo de vida:
Las hembras alcanzan
la madurez sexual entre uno y medio y tres años de edad. Normalmente el
promedio de gestación es cada dos o tres años a lo largo de su vida
reproductiva.
Solo las hembras
participan en la crianza de los hijos. Las pumas hembra son feroces protectoras
de sus cachorros, y se las ha visto luchar con éxito contra animales mucho más
grandes en su defensa. El tamaño típico de la camada es de entre uno y seis
cachorros, generalmente dos o tres. Utilizan como madrigueras cuevas y otros
lugares que ofrezcan protección. Los cachorros de puma nacen ciegos, son
completamente dependientes de su madre en un primer momento, y comienzan a ser
destetados en torno a los tres meses de edad. A medida que crecen, acompañan a
la madre en sus incursiones, en primer lugar a los sitios que visita, y después
de seis meses comienzan a cazar pequeñas presas por su cuenta.
La esperanza de vida
de un puma en la naturaleza se estima entre 8 y 13 años y, probablemente, está
en un promedio de 8 a 10 años.
Hoy
habitan en provincias del Norte, con Chaco, Jujuy y Salta a la cabeza.
Actualmente
se encuentra en reservas y en varias zonas ubicadas en Argentina. Se dice que
es un animal endémico de ahí.
Ximena Nohemí Balanzar Zapién.